Perteneciente al género Hura de
origen tropical americano, su nombre le viene de las ruidosas explosiones de
sus frutos cuando dispersan sus semillas: balistocoria es el concepto botánico que describe este fenómeno. Su tronco es espinoso y al parecer tiene un
latex muy venenoso.
De la mano de Carlos Ríos conozco
esta nueva localidad urbana de este peculiar árbol.
G. Kunkel conoció otro ejemplar
al que dió su particular adiós en este nostálgico artículo publicado en la
prensa local.